lunes, 27 de julio de 2015

PASEOS CON ASIGNATURAS PENDIENTES

Tarde corriente de paseos por la calle Princesa... Entrando y saliendo de comercios de moda en los que hago un sobreesfuerzo para no gastarme la paga de la semana en caprichos innecesarios que me hacen creer que si los compro aumentarán mi autoestima. Entonces me paro y reflexiono que me da igual la de ropa y accesorios que pueda guardar en mi armario mientras no me guste yo. NINGUNA PRENDA VA A DARME ESA SEGURIDAD EN MI MISMA QUE TANTO ANSÍO.

Sería hipócrita sino reconociese ante vosotros, mis lectores, que cada uno de esos comercios angostos, heladores debido al fuerte aire acondicionado y agobiantes por el volumen de su música, me sirve para revisar mi silueta de arriba a abajo. Sí, aún no tengo esa asignatura superada. Lo único que puedo hacer es permitir que no me afecte lo que veo y que aun así pueda sonreír y luchar por ser feliz.

El otro día hablaba de los espejos. Para alguien que aún está luchando contra este bicho es casi imposible pasar por alto un escaparte en el que se refleje su imagen o un espejo en el que mirarse. Lo triste de estos actos es que, aunque acabes de mirarte en el espejo de la tienda anterior que pisaste, aun así te vuelves a mirar en el nuevo con la esperanza de ver algo distinto que antes pasaste por alto: unas piernas delgadas, unos brazos delgados, una chica estilizada... NADA, SIEMPRE TE VES IGUAL. Ese día que tanto ansias, con el que sueñas cada noche, aquel en que te mires al espejo y te veas delgada nunca llega. Desesperante y descorazonador aspirar a ello cada día desde que te levantas hasta que te acuestas durante seis largos e infernales años, ¿no? ¿Cuántas veces puedo llegar a examinar mi reflejo a lo largo de un día? Creo que a partir de ahora las contaré y me pondré un límite. Así, si son las seis de la tarde y ya me he mirado diez veces desde el amanecer, no podré volverme a mirar hasta el día siguiente.


Bueno, seguimos examinando la tarde de paseo. Otra asignatura pendiente: DEJAR DE ANALIZAR A LAS CHICAS DELGADAS (a mi parecer) con rayos x. Y es que ya me lo decía hace unos años mi psiquiatra: "las chicas que tenéis anorexia parecéis lesbianas. Os fijáis más las unas en las otras que los chicos en vosotras”. Es verdad, de repente voy paseando y "zas", se cruza en mi camino una pedazo de tía: alta, delgada, con "tipazo"... y la cosa no se queda en fijarme en ella, sino que en cuanto pasa de largo giro automáticamente la cabeza y grabo su figura de la cabeza a los pies en mis retinas. Este acto me sale muchas veces de forma inconsciente... Aun así, estoy luchando por dejarlo de lado. Porque da exactamente igual el cuerpo que tenga esa modelo o esa 'it girl' de instagram. Yo no soy ella, ni ella es yo. Yo jamás podré tener su cuerpo, ni ella el mío. NO EXISTEN DOS CUERPOS IGUALES. Por lo tanto, aspirar a tener el cuerpo de otra sólo te va a conducir a la frustración, a la amargura, a la impotencia, a ser profundamente infeliz y, por supuesto, a no curarte nunca.

5 comentarios:

  1. Te leo y en cierta medida me identifico.
    Siempre mirando al espejo una silueta fofa, siempre aspirando a un peso que mi altura y mi cuerpo no se pueden permitir.
    Siempre queriendo ser tan guapa, tan delgada, tan bien maquillada y vestida como otra.
    Siempre sin darnos cuenta de lo bonitas que somos, cada una con sus cosas.
    Mucho que reflexionar con este post..
    Un fuerte achuchón y ¡Ánimo! :)

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  2. Muchas gracias. Me encanta que me escribas.
    Vamos a ganarle la batalla a ana ya verás, hay que seguir luchando.
    Un abrazo fuerte!! y Ánimo a ti tambien!!

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  3. Hola acabo de descubrir tu blog paso por esta enfermedad mi familia no es consciente no le entra en la cabeza y estuve seis meses en un cebtro de dia por voluntad propia lo deje pero se que necesito volver no tengo sintomas de cuerpo pero si emocionales no se coml hacerlo

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  4. Hola acabo de descubrir tu blog paso por esta enfermedad mi familia no es consciente no le entra en la cabeza y estuve seis meses en un cebtro de dia por voluntad propia lo deje pero se que necesito volver no tengo sintomas de cuerpo pero si emocionales no se coml hacerlo

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  5. Dales tiempo. Cuesta mucho aceptar una enfermedad así. Pero llegara el día tranquila. Mi padre tardó 6 años! Tú céntrate en recuperarte y no olvides q no estás sola :) Un abrazo y mucho ánimo!!!

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